Emprendedores con muchos acentos

Asturias comienza a ser un destino atractivo para los inmigrantes. La mayoría llega para encontrar un empleo digno y emprender una nueva vida. El proceso de normalización de los extranjeros da pasos de gigante y un síntoma de este avance de su integración es que los inmigrantes no llegan sólo para ser mano de obra barata, también aspiran a crear riqueza. Es el caso de la guineana Lourdes Alene, con su Dama de África en Oviedo, o la familia venezolana Morli, con su quesería de Olloniego, o la astur-chilena Esperanza Medina, con su negocio de cerámica en Pravia. El año pasado la población extranjera en el Principado se incrementó un 20 por ciento, lo que supone cerca de 27.000 nuevos residentes de otras nacionalidades. Los trabajadores inmigrantes empadronados en Asturias suman aún un 2,09 por ciento, muy lejos del 8 por ciento de la media nacional. Aunque tradicionalmente las regiones mediterráneas y Andalucía son las que más atraen a los inmigrantes, datos como los 510 bebés nacidos en 2005 en el Principado de madre extranjera, o las 579 bodas entre asturianos y extranjeros muestran que la globalización ya no es un fenómeno ajeno al Principado. En el curso 2006-07, 4.000 niños nacidos en otros países llenarán las aulas asturianas, un 20 por ciento más que en el anterior curso. Y tras el fin del primer proceso de regularización, cada vez son más las familias que se reúnen en Asturias con los miembros que dejaron sus países para buscar un vida mejor. Los inmigrantes trabajan mayoritariamente en el servicio doméstico, la construcción y la hostelería, pero otros montan su propia empresa en nuestra región, y empiezan a ser una fuerza a tener en cuenta dentro del panorama empresarial asturiano.
Vía: ine.es;blogalaxia,tags: ...economia.suprglu.com